El Sindicato de Técnicos de Enfermería comunica, a través de notas de prensa o cartas al director, a los medios de comunicación todas aquellas informaciones de interés público y profesional en las que SAE es noticia.
Burgos, 23 de julio de 2021.- Los Técnicos en Cuidados de Enfermería llevan años realizando sus funciones acorde a un estatuto de 1973 sin que estas se hayan actualizado conforme ha evolucionado la sociedad y la asistencia sanitaria.
Los diferentes convenios laborales recogen estas funciones y en los centros de trabajo se adaptan éstas y según las necesidades y la situación de cada momento. Esto supone que funciones que los TCE han realizado durante años las direcciones decide asignarlas a otros colectivos hasta que por las necesidades y la falta de personal en ese colectivo se delegan, nuevamente, a los TCE.
Esta es la habitual situación en Servicios Sociales donde sus responsables, y a pesar de la situación que se está viviendo, no han tenido la capacidad de prever las contrataciones necesarias para cubrir las vacaciones del colectivo de enfermeras. Ante esta situación de falta de otros profesionales, por delegación de trabajo, se imponen a los Técnicos en Cuidados de Enfermería las funciones que las direcciones consideran.
Esta lamentable situación provoca un profundo malestar entre los Técnicos en Cuidados de Enfermería que se saben imprescindibles para el sistema sanitario pero se sienten utilizados por la Administración.
¿Valemos? o ¿no valemos? se preguntan cada vez que se les utiliza para llevar a cabo funciones a través de la famosa delegación pero que cuando apelan al reconocimiento de las mismas se les niega. Por eso, es una prioridad la actualización de las funciones acorde a la realidad actual del sistema sanitario.
Los TCE participarán de la medida pero el concepto retributivo correspondiente a estos profesionales no figura en la Orden de Nóminas
Burgos, 23 de julio de 2021.- La crítica situación que se vive en el Complejo Asistencial de Burgos y la falta de refuerzos en las unidades de Covid, supone que a los Técnicos en Cuidados de Enfermería les estén suprimiendo todos los permisos a excepción de vacaciones y permisos por enfermedad grave de familiar.
Estos refuerzos serán retribuidos a todos los profesionales, tal y como figura en la Orden de Nóminas del Personal de Sacyl en la que los TCE no figuramos, dejando esta compensación a merced de lo que decidan las direcciones y donde se evidencia, claramente, el agravio comparativo que sufrimos los TCE. Por ello, desde SAE exigimos que los TCE sean incluidos debidamente en la Orden de Nóminas del Personal, tal y como está estipulado en otros profesionales.
El director de enfermería del hospital reconoce el sobreesfuerzo que realizamos los profesionales y la crítica situación que se está viviendo, apelando a la responsabilidad como personal sanitario que somos “a pesar del cansancio y el hastío de los profesionales vamos a estar, una vez más, al lado de nuestros pacientes”.
Los TCE lo estaremos igual que hemos estado desde marzo de 2020 y, una vez más, quedará claro que nuestro papel es fundamental para la sanidad, pero confiamos que de una vez por todas, para la Gerencia no seamos imprescindibles solo cuando a ellos les interesa y nos obvien siempre en los acuerdos.
El Servicio Andaluz de Salud da la razón al Sindicato de Técnicos de Enfermería (SAE) y a partir de ahora serán los celadores quienes trasladen las muestras biológicas desde las distintas unidades del Hospital de Jerez hasta los laboratorios del complejo hospitalario.
En este mismo sentido se ha pronunciado la Dirección del hospital, que, tras años de reivindicación, finalmente nos ha dado la razón y nos ha comunicado que trasladará a los celadores su obligación de realizar esta función.
Hasta ahora, los celadores solo llevaban a cabo esta tarea en los turnos de mañana y tarde de lunes a viernes, pero no durante las noches, festivos y fines de semana, siendo los profesionales Técnicos en Cuidados de Enfermería (TCE) quienes debían realizar este traslado sin ser de su competencia.
Según diferentes sentencias, el traslado de muestras biológicas no precisa una actividad especial, preparación técnico sanitaria ni conocimientos específicos de esta naturaleza, por lo que no existe incompatibilidad alguna entre el carácter de personal no sanitario del celador y la realización de esta función.
“Desde SAE llevamos años luchando para que se cumpla la legislación vigente y, finalmente, nuestro esfuerzo y trabajo han tenido como resultado una resolución favorable para que el traslado de muestras biológicas sea llevado a cabo por los profesionales que tienen asignada esta tarea, lo celadores. Sin embargo, en otros hospitales de Cádiz como en el de Puerto Real esta labor la siguen realizando los TCE, por lo que SAE adoptará las medidas jurídicas oportunas para hacer cumplir la legislación vigente. Además, nuestra organización continuará trabajando para que el reparto y recogida de las bandejas de comida en las plantas también sea realizado por quienes deben hacerlo, los pinches de cocina, y no por los TCE”, explica Fátima Márquez, secretaria provincial de SAE en Cádiz.
Los Técnicos en Cuidados de Enfermería (TCE) de la UCI de Quirón Palmaplanas han trasladado a Rafael Santacasilda, su superior en el servicio, su estado de agotamiento y burnout obteniendo como respuesta “esto es lo que hay”.
Este tipo de respuestas son inadmisibles, por ello desde USAE nos hemos puesto en contacto con Jose Barrando, director de Recursos Humanos, y Víctor Ribot, gerente del centro, para que busquen una solución antes de que los profesionales caigan enfermos por estrés o ansiedad.
Actualmente, en el servicio de UCI Covid hay un TCE para atender a 3 o 4 pacientes y en la UCI limpia la plantilla es de 4 TCE en el turno de mañana, 3 en el de tarde y 2 en el de noche para atender a diez pacientes. A esta situación se une el hecho de que a los TCE de la UCI Covid se les obliga a limpiar los EPIs de todos los profesionales, lo que USAE ha denunciado en Inspección de Trabajo.
Los agravios comparativos que sufren los TCE no terminan aquí: a finales de agosto, los enfermeros de Quirón cobrarán un plus de fidelización de 1.600 euros por el trabajo realizado frente a la Covid, mientras que el resto de categorías profesionales no percibirán ninguna cuantía a pesar de haber estado en primera línea de actuación con los pacientes, tal y como siguen haciendo ahora.
“La situación en este empresa es insostenible por ello reivindicamos que se adecuen las plantillas para no poner en riesgo la salud de los profesionales y los pacientes y que se abone un plus de fidelización igual para todos los trabajadores que han luchado contra la Covid, acabando así con este sangrante agravio comparativo”, explica Susana González, responsable de USAE en Quirón Palmaplanas.
La saturación de las urgencias en los hospitales de Baleares ha hecho saltar todas las alarmas sin que ni IB-SALUT ni las direcciones de los hospitales hagan caso a la reivindicación que desde hace un par de semanas viene realizando el Sindicato de Técnicos de Enfermería (SAE).
A las once de esta mañana más de 40 pacientes estaban esperando en las urgencias del Hospital Son Llàtzer a ser atendidos ya que tanto las camas de urgencias como la unidad de corta estancia están completas y la unidad planta 1ª B está cerrada por falta de profesionales de enfermería. Ayer, los pacientes fueron desviados a una clínica privada, pero la solución no es sobrecargar la sanidad privada cuando el hospital tiene espacio suficiente para atender a todos los pacientes y lo único que faltan son profesionales para hacerlo. Por ello, denunciamos, una vez más, esta falta de plantilla, que se repite en todos los hospitales de Baleares.
La situación es tan extrema que en algunos centros ya han empezado a cancelar operaciones programadas para dejar camas disponibles para los ingresos que llegan del servicio de urgencias.
A este problema se añade el aumento de ingresos positivos por Covid en las islas (en el hotel Covid hay más de 260 turistas ingresados positivos y sus acompañantes), que en algunos hospitales, como el de Manacor, se une a la presión asistencial de las urgencias, que está alcanzando los 200 pacientes diarios, cuando lo habitual para un hospital comarcal es que esta cifra no supere los 120.
“Es urgente que desde IB-SALUT se incrementen las plantillas de profesionales, pues es la única medida que acabaría con la saturación en los hospitales que, como venimos insistiendo desde hace semanas, pone en riesgo la salud de pacientes y profesionales. Todos vemos que esta situación es insostenible, por lo que ya es hora de que los gerentes de la sanidad balear se pongan a trabajar y solucionen el problema antes de que las consecuencias sean peores. La fórmula es simple: más profesionales permitiría abrir espacios ahora cerrados y todo ello mejoraría la calidad asistencial y acabaría con la sobrecarga laboral”, explica Daniel Torres, responsable de SAE en Baleares.