El Sindicato de Técnicos de Enfermería comunica, a través de notas de prensa o cartas al director, a los medios de comunicación todas aquellas informaciones de interés público y profesional en las que SAE es noticia.
El último informe publicado por el Ministerio de Sanidad Indicadores Hospitalarios evolución 2010-2014 confirma, de manera oficial, lo que desde el Sindicato de Técnicos de Enfermería (SAE) se viene denunciando en los últimos años: la alarmante pérdida de puestos de trabajo de la enfermería básica: cerca de 4.000 Técnicos de Enfermería en cuatro años.
“Los datos son tan fríos como evidentes pero el informe no analiza ni las causas verdaderas de este descenso ni las consecuencias del menor número de profesionales” afirma la Secretaria de Comunicación de SAE, Isabel Lozano.
Lo que también llama poderosamente la atención es que de todas las categorías profesionales sanitarias, solo ha disminuido la de Técnicos en Cuidados de Enfermería (o Auxiliares de Enfermería como errónea e inexplicablemente sigue refiriéndose al colectivo el propio Ministerio de Sanidad) mientras que las demás han aumentado, a pesar de que se registre, por ejemplo, una importante disminución del número de partos, como muy bien indica el mismo informe.
Ante esta forma tan descabellada de actuar de los gestores de los distintos servicios de salud, solo cabe preguntarse a qué intereses obedece la contratación de ciertos profesionales en detrimento de los verdaderamente necesarios. Desde luego no al interés del paciente que sufre como esta disminución le lleva a esperar a veces, incluso horas para que le cambien el pañal o le realicen el aseo diario porque el déficit de estos profesionales es más que evidente.
“Y es que las consecuencias las padecen tanto los pacientes cuya calidad asistencial se devalúa de forma proporcional, ya que cuanto menor sea el número de profesionales menor será el tiempo de atención y dedicación, como los propios profesionales, que ven aumentada de forma alarmante su sobrecarga de trabajo, desembocando muchas veces en enfermedades propias, pues no hay que olvidar que el trabajo asistencial a personas enfermas supone una carga emocional importante y añadida al trabajo físico ”, continúa la responsable de SAE.
Las causas que han originado este descenso de Técnicos en Cuidados de Enfermería hay que buscarlas, fundamentalmente, en la escasa optimización de los recursos humanos que se lleva a cabo en la mayor parte de los centros sanitarios del país que, en no pocas ocasiones, contrata a profesionales con perfiles académicos y profesionales muy superiores para puestos de trabajo en los que la excesiva especialización no es fundamental y se hace en detrimento de la contratación del profesional idóneo para cada puesto, además de que supone un gasto mucho mayor del necesario.
Es ya una realidad que la población ingresada en los hospitales es una población envejecida que requiere de cuidados fundamentales y no de cuidados especializados ya que en su mayor parte padecen enfermedades crónicas.
Sin embargo no parece, que las Administraciones Públicas Sanitarias tengan en cuenta estos cambios que se vislumbran y que, sin duda, deben influir decisivamente en el tipo y número de profesionales que son necesarios, así como en su formación y cualificación profesional.
El modelo sanitario actual debe reorientar sus objetivos en función de la realidad sociodemográfica y reorientar las plantillas de profesionales de acuerdo a las necesidades reales. En caso contrario, periódicamente se publicarán informes como el señalado en el que se observarán variaciones en los datos numéricos, sin analizar las consecuencias que estos datos reflejan, y lo que es mucho peor, sin aportar soluciones eficaces que eviten el despilfarro que lleve a la ruina a los servicios de salud.
La única solución para los problemas asistenciales es el aumento de personal
Melilla, 28 de noviembre 2016.-El Sindicato de Técnicos de Enfermería (SAE) espera que no sea necesario tener que aplicar el Plan de actuación ante pacientes agitados ideado por el Hospital Comarcal porque parece tan absurdo como ineficaz.
Según el protocolo establecido en este Plan ante un paciente de la unidad de psiquiatría que está agitado y ante quien no son eficaces medidas como el establecimiento de la relación de confianza para poder administrarle la medicación y retirarle a su habitación, es decir, ante un paciente con riesgo de ponerse agresivo se debe llamar a un Técnico de Cuidados de Enfermería del servicio de Traumatología (que es la unidad más cercana a la de psiquiatría) para realizar las maniobras que correspondan.
Se plantean algunos inconvenientes ya que mientras se procede a efectuar la llamada la agitación del paciente puede ir en aumento, el TCE correspondiente tendrá que dejar de realizar los cuidados que en este momento esté llevando a cabo con un paciente, o terminarlos, para poder acudir a la llamada de Psiquiatría. Y tendrá que terminar, y retrasar su presencia en Psiquiatría, o dejar al paciente sin atender dada la sobrecarga excesiva de trabajo y las deficitarias plantillas en el servicio de Traumatología.
Además, los profesionales de esta unidad están al límite de sus capacidades físicas y emocionales. Recordamos que en las últimas semanas y ante la falta de camas y personal en el servicio de obstetricia la demanda asistencial de las madres y los recién nacidos se está asumiendo por el personal de Traumatología.
La solución es la misma para todos los problemas: más personal en todas las unidades. Sólo así, la atención será la necesaria para cada caso y con la puntualidad y celeridad que sea necesaria, incluso en el caso de los pacientes de Psiquiatría.
“Los TCE están al límite y Traumatología no puede seguir siendo el parche de todas las unidades, solamente por su ubicación cercana al resto de los servicios. Es necesaria un aumento de profesionales de inmediato. En caso contrario la situación, que ya es alarmante para todos, puede llegar a ser peligrosa”, finaliza la secretaria autonómica de SAE en Melilla, Carmen Guerrero.
El equipo de enfermería parte de la humanización de la asistencia sanitaria
Madrid 22 de noviembre de 2016.-. El Consejero de Sanidad de Madrid, Jesús Sánchez Martos, clausurará mañana 23 de noviembre las Jornadas Profesionales que se celebrarán en el Hospital Doce de Octubre. Bajo el epígrafe El equipo de enfermería, parte de la humanización de la asistencia sanitaria, las ponencias que se presentarán en este encuentro formativo centran su desarrollo en plantear los aspectos que deben tener en cuenta los profesionales sanitarios para conseguir humanizar la sanidad, aplicando los principios necesarios para que el trato humano en la atención sanitaria sea una realidad para todos y cada uno de los pacientes.
Las entidades organizadoras (SAE y FAE) comparten la necesidad de humanizar la sanidad y con este objetivo se han planteado estas jornadas formativas en los centros de Madrid.
Con el objetivo de conocer mejor el Plan de Humanización que desde la Comunidad se ha planteado, las jornadas se iniciarán con la participación de Cristina González, Subdirectora General de Atención al Ciudadano y Humanización de la Asistencia Sanitaria de la Comunidad de Madrid, que abordará las líneas de actuación que la Consejería de Sanidad va a establecer en el ámbito de la humanización de la asistencia. A continuación, será el turno de la psicoanalista Elizabeth Aurora Cantero Melin con su ponencia Travesía humana y duelo. Seguidamente se presentará una mesa redonda en la que los profesionales plantearán los diferentes enfoques en relación a un punto central ¿Tenemos conflictos éticos a la hora de prestar cuidados?
Los asistentes escucharán también la intervención de los profesionales Gabriel Heras y José Sesmero, quienes presentarán su trabajo Proyecto HU-CI, y la ponencia Los cuentos humanizan, presentada por un equipo de trabajo de Técnicos en Cuidados de Enfermería: Yolanda Asperillas Santos, Manuela D. Zorita Prieto, Mª José Alonso García, Fátima García Valencia, Luz Divina Gago y Mariam Rodríguez.
La última ponencia de la jornada, Humanizando los Cuidados, será del experto en Humanización de la Salud, José Carlos Bermejo Higuera.
Sin duda encuentros como éste son los indicados para iniciar esa revolución a la que apela el Plan de Humanización de la Comunidad de Madrid.
Castellón, 25 de octubre de 2016.- El Sindicato de Técnicos de Enfermería (SAE) considera que la reclamación interpuesta por una central sindical en relación con el papel de los Técnicos en Cuidados de Enfermería en las actividades de radiología supone un perjuicio para estos profesionales y es una muestra más del poco respeto que los otros sindicatos tienen hacia el colectivo.
Soraya Beltrán, secretaria autonómica de SAE en la Comunidad Valenciana, manifiesta que resulta indignante para los profesionales que se considere que retribuir al personal técnico en cuidados de enfermería constituye una actuación totalmente irregular que debe dejar de realizarse.
El Director de Recursos Humanos de la Sanidad apela en su respuesta a una supuesta e inadecuada aplicación analógica en materia de retribuciones. Sin embargo, no se hace el mismo planteamiento en la analogía respecto al trabajo realizado por los TCE.
De la misma manera que se considera que se puede recurrir en el momento a TCE que estén realizando su jornada ordinaria en el momento. No obstante, no se plantean que esta misma situación se lleve a cabo con el resto de profesionales que intervienen en estas actividades de radiología intervencionista a quienes sí se les asignan turnos de guardia localizada y se les retribuye por este concepto.
El documento remitido por la Dirección de Recursos Humanos dando respuesta a la reclamación interpuesta por Simap- Intersindical supone un claro menosprecio al colectivo de Técnicos en Cuidados de Enfermería, a sus funciones y al papel que desempeñan en la sanidad valenciana.
Los trabajadores del centro de diálisis de León han puesto en marcha un calendario de huelga al no poder negociar con la dirección del centro, gestionado por el Grupo Fresenius Medical Care, unas condiciones de trabajo dignas.
Entre las reivindicaciones que justifican esta huelga, que comienza el 17 de octubre y, en principio, tendrá ocho días de duración, destacan la petición de la equiparación retributiva de estos trabajadores con respecto a los compañeros del resto de centros gestionados por Fresenius, tanto en la comunidad de Castilla y León, como en el resto de comunidades; la consecución de la igualdad salarial para todos los profesionales según su categoría profesional; el reconocimiento de los trienios; la retribución de las horas extraordinarias realizadas, así como de los días festivos trabajados; y el cobro de la paga de beneficios por parte de todos los trabajadores.
Además, en BOCYL de 14 de octubre de 2016, han salido publicados los servicios mínimos decretados por la Consejería de Sanidad, siendo éstos la totalidad de la plantilla habitual, de lo que se deduce que se está trabajando bajo mínimos todo el año.
“SAE reivindica que los profesionales leoneses tengan un trato igualitario con respecto al resto de profesionales de otras provincias. Es injustificable que la falta de representación sindical en el centro, le sirva como excusa a la dirección para mantener unas condiciones laborales y retributivas tan poco dignas para los trabajadores. Por ello, SAE apoyará todas las medidas que tomen los trabajadores y pondrá los servicios jurídicos a su disposición”, explica Pilar Castro, secretaria provincial de SAE en León.