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USAE lleva meses comunicando al Director de Gestión del Hospital de Son Llàtzer las elevadas temperaturas que tienen que soportar los pacientes y los profesionales en el centro hospitalario al no funcionar los sistemas de aire acondicionado, sin obtener una solución real por parte del responsable del hospital, quien lo único que argumenta para justificar esta situación es que los aparatos “no tiran más”.
Este tipo de respuestas solo demuestran la falta de interés por solucionar un problema de salud laboral tipificado en el anexo III del Real Decreto 486/1997, de 14 de abril, por el que se establecen las disposiciones mínimas de seguridad y salud en los lugares de trabajo: “en la medida de lo posible, las condiciones ambientales de los lugares de trabajo no deben constituir una fuente de incomodidad o molestia para los trabajadores. A tal efecto, deberán evitarse las temperaturas y las humedades extremas…”.
Asimismo, se recoge que la temperatura de los locales donde se realicen trabajos ligeros estará comprendida entre 14 y 25 ºC. Sin embargo, usuarios y profesionales del hospital Son Llàtzer están soportando temperaturas de más de 27º con un 63% de humedad, lo que, desde luego, contraviene claramente la legislación vigente.
“Los usuarios y sus familiares han tenido que traerse ventiladores de casa para hacer frente a esta situación, pero, desde luego, no es una solución viable, pues lo único que hacen es mover el aire caliente de la habitación. Es lamentable que las instalaciones del hospital no sean las adecuadas en este sentido, por ello desde USAE seguiremos exigiendo que se repare el sistema de climatización para garantizar que los niveles de temperatura se encuentren dentro de lo marcado por la legislación y no supongan un riesgo para la seguridad y la salud de los usuarios y trabajadores”, explica Sergio David Pérez, delegado de USAE en el hospital.
45 horas esperando una cama
USAE denunció el pasado martes la situación de saturación que se está viviendo en el servicio de urgencias del Hospital Universitario de Son Espases sin que la dirección médica y de enfermería hayan adoptado medidas para que ésta mejore: hoy son 131 pacientes los que permanecen hacinados, de los cuales 46 están pendientes de cama en planta -15 la tienen asignada para esta tarde-.
Es inadmisible que los usuarios tengan que esperar más de 45 horas para conseguir una cama y que el hospital mantenga cerradas 106 durante este verano por el plan vacacional. Las Islas Baleares son una de las comunidades españolas que más población recibe en los meses estivales, sin embargo, en lugar de reforzar los servicios sanitarios, se cierran camas y no se cubren las vacaciones de los profesionales.
“Desde USAE esperamos que esta situación cambie lo antes posible, pues vulnera la dignidad de los pacientes y su derecho a tener una atención de calidad, así como pone en riesgo la salud de los profesionales, sometidos a un alto nivel de estrés. En este sentido, hoy hemos solicitado en Salud Laboral una medición de estrés psicosocial debido al síndrome de burnout del que algunos trabajadores están dando síntomas. Es intolerable que siga primando el ahorro económico por encima de la atención al usuario”, explican Alejandro Juan Alonso, delegado de USAE en Son Espases.
USAE denuncia una vez más la situación insostenible que se está viviendo en las urgencias del Hospital Universitario de Son Espases, donde a estas horas 151 pacientes permanecen hacinados, de los cuales 44 están pendientes de cama en planta (un señor de 71 años lleva más de 80 horas esperando en urgencias una cama).
Año tras año el cierre de camas en este hospital de referencia -106 este verano, el doble que el año pasado- agrava la ya de por si penosa situación que se vive en este servicio, donde la saturación se produce con mayor frecuencia de la que debería debido a la falta de espacio y la pésima gestión de la Gerencia; una muestra de esta realidad la encontramos en el hecho incomprensible de que durante los meses de verano, cuando la población flotante se multiplica significativamente en la isla, el hospital de referencia cierre 106 camas.
“Estas cifras son inadmisibles y más cuando desde USAE no dejamos de denunciar la situación a la Dirección Gerencia del hospital sin que aún se hayan adoptado medidas para mejorar la presión asistencial que existe desde hace semanas en el centro hospitalario. Usuarios hacinados no es sinónimo de calidad asistencial y tener a los profesionales saturados y sometidos a niveles de estrés extremos está muy lejos de garantizar su salud física y mental, que es responsabilidad de la empresa. Es intolerable que se esté jugando así con la salud de los trabajadores y los usuarios, por ello, desde USAE exigimos el incremento de plantillas, tanto de TCE como del resto de colectivos, y que, de una vez, prime la salud y el interés común de los ciudadanos por encima del ahorro económico”, explican Alejandro Juan Alonso, delegado de USAE en Son Espases.
12 ambulancias paradas en Mallorca y dos en Menorca (el recurso de Mercadal y el recurso de refuerzo de Ciudadella), lo que deja a esta isla únicamente con dos recursos, es la situación actual en la que se encuentra el servicio de atención extrahospitalaria de las Islas Baleares debido al mal mantenimiento de los vehículos por parte de GSAIB y a la pésima previsión por parte de la empresa responsable.
Desde USAE queremos denunciar esta situación porque es indignante que tanto ciudadanos como trabajadores tengan que asumir las consecuencias de esta mala gestión; en el primer caso, los usuarios, que durante los meses estivales se multiplican debido a la población flotante, dejan de percibir la atención de calidad a la que tienen derecho al tener que sufrir esperas innecesarias, y en el segundo, los vehículos que quedan deben absorber el trabajo de los que están fuera de servicio, por lo que los profesionales están sometidos a una sobrecarga laboral.
El año pasado, desde USAE exigimos un incremento de profesionales Técnicos en Emergencias Sanitarias para cubrir las necesidades de atención extrahospitalaria de la isla, y este año, a pesar de las dificultades –insularidad mal retribuida, un inexistente complemento de difícil cobertura o numerosas complicaciones para conseguir una vivienda asequible- contamos con el número adecuado de trabajadores, pero no disponemos de las ambulancias suficientes para que puedan trabajar. Es inaceptable, que, con el esfuerzo que cuesta traer profesionales a las islas, nos veamos en esta situación, que esperamos se solucione a la mayor brevedad y los usuarios puedan recibir un servicio sin demoras y los profesionales puedan realizar su trabajo en las condiciones adecuadas”, explica Alejandro Juan Alonso, responsable de USAE en Baleares.
A este hecho, se suma la merma de recursos operativos que se produce cuando varios vehículos que no cuentan con aire acondicionado deben parar su actividad atendiendo a la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, que no permite el trabajo a más de 27º en la cabina asistencial, una temperatura que se alcanza sin problema en estos días de especial calor, cuando se ha llegado a más de 40º dentro del vehículo. Desde USAE hemos denunciado estos hechos y exigimos que estos recursos se arreglen cuanto antes para poder desarrollar su actividad.
“Hemos hablado con la Gerencia del 061 y comparten nuestra preocupación ante la situación que se está viviendo en la atención extrahospitalaria de las Islas Baleares. Esperamos que el nuevo Gobierno, que firma esta tarde los cargos, adopte las medidas necesarias cuanto antes para que la flota de ambulancias sea la adecuada a las necesidades asistenciales de las islas”, concluye Alejandro Juan Alonso.
El periodo estival trae de nuevo la saturación de las urgencias del Hospital Son Espases, poniendo en riesgo la integridad de los profesionales y la calidad asistencial de los pacientes, que ven mermada, igualmente, su intimidad al tener que pasar horas en el servicio de urgencias esperando una cama.
Ayer lunes, uno de los pacientes ingresados en urgencias entró en parada siendo esta situación contemplada por el resto de usuarios que estaban en el servicio. Es inadmisible que la dirección del hospital permita estos episodios, que vulneran los derechos de los pacientes de forma sistemática, antes de elaborar un plan de contratación que evite el cierre de camas en Son Espases, hospital referente en la isla.
“Esta situación viene provocada el elevado volumen del cierre de camas del área de hospitalización que la gerencia ha llevado a cabo debido a su incapacidad para realizar la contratación de profesionales para cubrir las vacaciones de la plantilla, el significativo incremento de usuarios debido a la población flotante que recibe la isla en periodo estival, y a la eliminación del concierto UBES que permitía derivar pacientes de la pública a la privada en momentos de saturación. Este cúmulo de factores está generando situaciones de estrés y ansiedad entre los profesionales de hospitalización y de las áreas de críticos (urgencias, UCIs…) y quebranta el derecho de los usuarios a tener una atención de calidad, por ello desde USAE exigimos que se lleven a cabo las actuaciones necesarias, como las contrataciones de verano, para poder abrir las camas cerradas y dar así una atención adecuada a los usuarios. No puede seguir primando el ahorro económico por encima de la asistencia sanitaria”, explica Alejandro Juan Alonso, responsable de USAE en el Hospital Son Espases.