El Sindicato de Técnicos de Enfermería comunica, a través de notas de prensa o cartas al director, a los medios de comunicación todas aquellas informaciones de interés público y profesional en las que SAE es noticia.
El Sindicato de Técnicos de Enfermería espera que los portavoces de los distintos grupos parlamentarios cumplan con los compromisos adquiridos con SAE.
Ha concluido una ronda de reuniones con casi todos los grupos parlamentarios de las Cortes de Castilla y León a quienes se les han trasladado las reivindicaciones fundamentales para el colectivo al que representa la organización sindical.
Ana Tobal, secretaria autonómica de SAE, considera que la receptividad ha sido buena y hay compromiso por parte de algunos parlamentarios de llevar a las Cortes algunas de estas peticiones que son fundamentales para la sanidad castellano leonesa.
“El mantenimiento de la sostenibilidad del sistema pasa por optimizar los recursos humanos y llevar a cabo una ordenación adecuada de los mismos, además de una revisión exhaustiva y pormenorizada del gasto sanitario” ha explicado la secretaria autonómica de SAE en Castilla y León”.
Pero no sólo éstas, además SAE ha trasladado reivindicaciones fundamentales para el colectivo como es el desarrollo de funciones, previsto en el Estatuto Jurídico, o la carrera profesional para el personal laboral de los servicios sociales que está igualmente sin desarrollar a pesar de lo establecido en el EBEP.
“Confiemos en que cumplan sus compromisos y planteen ante las Cortes de Castilla y León las peticiones de los Técnicos en Cuidados de Enfermería”, finaliza Ana Tobal.
El Servei de Salut de les Illes Balears se ha comprometido con los responsables autonómicos del Sindicato de Técnicos de Enfermería (SAE) a estudiar su propuesta de reconocimiento tanto del conocido como solape, así como de las revisión de las funciones de los TCE.
“Los Técnicos en Cuidados de Enfermería llevamos años invirtiendo parte de nuestro tiempo libre prolongando la jornada laboral en informar a los compañeros del siguiente turno de la situación de cada pacientes. Es el tiempo conocido como “solape” de manera que la atención que tiene el paciente es continuada y es un tiempo que forma parte de los cuidados invisibles y de humanización que llevamos a cabo los Técnicos en Cuidados de Enfermería,”, manifiesta la Secretaria Autonómica de SAE, Francisca Galmés.
La reivindicación de los profesionales, abanderada por SAE es que ese tiempo se considere tiempo efectivo de trabajo, se reconozca y se compense en la forma en la que se considere más adecuada.
Asimismo, en relación con las funciones hemos recordado a los responsables del Servei lo anacrónico de la situación ya que continúan estancadas en el obsoleto Estatuto de Personal Sanitario no Facultativo de la Seguridad Social de 1973, derogado por el Estatuto Marco en todo su desarrollo a excepción del capítulo concreto de las Funciones, lo que evidencia que las funciones que realizamos actualmente los TCE, tanto asistenciales, como docentes o investigadoras, no están recogidas en ningún texto normativo.
La propuesta de SAE está respaldada por las firmas 1.500 profesionales que dentro de la campaña Por un trato justo han avalado la reivindicación de SAE en Baleares. Las firmas se han registrado esta mañana con anterioridad a la reunión mantenida con los responsables sanitarios.
Confiamos en que el estudio al que se han comprometido tenga el resultado que los profesionales esperan mejorando sus condiciones laborales”, finaliza Francisca Galmés.
El pasado 6 de julio los responsables de SAE, Isabel Lozano y Jorge Santurio, participaron en un encuentro informativo con el consejero de sanidad extremeño, José María Vergeles. En el mismo tuvieron ocasión de recordarle las reivindicaciones fundamentales de los TCE en Extremadura.
El Sindicato de Técnicos de Enfermería SAE espera que la Proposición no de ley aprobada ayer por el Parlamento en relación con la recuperación de la jornada laboral de 35 horas semanales sea definitivamente aprobada por el Gobierno de Canarias y los profesionales recuperen este derecho perdido durante los años de la crisis.
Efectivamente, tal y como ha reconocido el diputado Marcos Hernández el papel de los sindicatos en esta reclamación ha sido importante y activo.
En este sentido, ha sido fundamental la campaña emprendida por SAE a nivel nacional en la que, entre otras medidas, se ha llevado a cabo el registro de diferente documentación y una recogida de firmas que sigue en activo. Los profesionales sanitarios están apoyando masivamente esta campaña “Para que no se les olvide, póntela” y lucen una chapa en la que reivindican, individualmente, “35 hora YA”.
Asimismo, desde el Sindicato de Técnicos de Enfermería se insiste en que esta recuperación se lleve a cabo en las debidas condiciones sin pretender llegar a acuerdos falsos como está ocurriendo en algunos servicios de salud.
La jornada de 35 horas es un derecho que se perdió como consecuencia de los recortes provocados por la crisis: se suprimió para todo el año y para todo el año hay que recuperarlo.
Queremos propuestas reales que restituyan la jornada de 35 horas tal y como estaba antes de la crisis y no cortinas de humo que juegan con los derechos de los profesionales.
Hasta que se consiga la restitución de este derecho con plenas garantías, el Sindicato de Técnicos de Enfermería continuará con su campaña reivindicativa y miles de profesionales sanitarios de todo el país trabajarán con su chapa reivindicativa, para que no se les olvide.
Más de un centenar de camas cerradas, no hay sustituciones profesionales y se pretende una ordenación equilibrada que es imposible conseguir
El Hospital Virgen de la Victoria cerrará 106 camas del 1 de julio al 30 de septiembre periodo en el que Málaga puede llegar a triplicar su población.
Va a resultar imposible cumplir con el objetivo propuesto en el plan de vacaciones de 2018 programado por la dirección gerencia del Hospital Universitario Virgen de la Victoria de Málaga que pretende “garantizar una oferta asistencial adecuada a las necesidades del periodo estival, con ordenación equilibrada y coherente de la actividad durante este periodo, especialmente servicios, unidades y categorías profesionales más afectadas”.
“Plantear una ordenación equilibrada cerrando más de un centenar de camas en un periodo en el que aumentan de forma considerable el número de usuarios que acuden a urgencias, muchos de los cuales tendrán que ser ingresados, es incoherente e irreal”, manifiesta al respecto Miguel Ángel Guerrero, delegado del Sindicato de Técnicos de Enfermería en el Hospital Virgen de la Victoria.
Sin embargo, la dirección de gerencia del centro maquilla la realidad afirmando por un lado que se “reservan” 86 camas y las 20 camas restantes, hasta las 106 que realmente permanecerán cerradas en verano, corresponden a las camas que están abiertas todo el año por los planes de accesibilidad y con las que establecen los plazos de garantías de las listas de espera quirúrgicas, sobre todo en cirugía cardiovascular.
Otra realidad enmascarada es la de considerar a los profesionales contratados para esos planes de accesibilidad como contratos para cubrir vacaciones, cuando en realidad está situación no es así.
La dirección de gerencia del centro se jacta de su maravilloso programa de gestión de camas que, sin embargo, está suponiendo un perjuicio para los usuarios que pueden ser llegar a ser ingresados en plantas que no corresponden con su patología lo que les expone a riesgos innecesarios en la atención que reciben. Asimismo, para los Técnicos en Cuidados de Enfermería este programa de gestión ha supuesto un importante aumento en las sobrecargas de trabajo.
“Este plan de gestión tiene más puntos sobre los que hacer un estudio y una valoración rigurosa y corregir las deficiencias que presenta que aquellos sobre los que la dirección pueda alardear. Ni los usuarios, ni los profesionales comparten motivos para compartir la satisfacción”.
“Desde SAE hemos pedido en reiteradas ocasiones una política de contrataciones acorde a las necesidades reales del hospital. En verano aumenta nuestra población, es evidente la necesidad de tener más profesiones en activo para poder llevar a cabo una calidad asistencial digna”, finaliza Miguel Ángel Guerrero.