El Sindicato de Técnicos de Enfermería comunica, a través de notas de prensa o cartas al director, a los medios de comunicación todas aquellas informaciones de interés público y profesional en las que SAE es noticia.
Los Técnicos en Cuidados de Enfermería (TCE), como profesionales que integramos los equipos de enfermería, estamos capacitados para llevar a cabo la vacunación por Covid-19. Es evidente que esta función requiere de una formación específica por nuestra parte, tal y como la Dirección General de Profesionales de la Salud ha explicado.
Desde el Sindicato de Técnicos de Enfermería (SAE) llevamos años luchando para que nuestra formación sea de grado superior porque entre nuestras funciones se encuentra la realización de técnicas que se encuadran dentro de este grado formativo. Con este encuadramiento se regularizarían nuestras funciones y podríamos cubrir las necesidades que surjan en el ámbito de la enfermería sin ningún tipo de problema. La decisión de la Dirección General de Profesionales de la Salud de optar por nuestra categoría profesional para reforzar la vacunación por Covid es un ejemplo de como los responsables sanitarios son conscientes de que nuestra formación debe ser de grado superior. Ahora las presiones recibidas han hecho que se dé marcha atrás y expliquen que solo vacunaríamos en caso de que fuera necesario para el avance de la campaña de vacunación.
“Estamos hartos de que se nos utilice: ahora por presiones no somos necesarios, pero si hacemos falta, tiran de nosotros. No es justo y por ello desde SAE pedimos que se regulen bien nuestras funciones y se reconozca nuestro grado superior. Nos merecemos este reconocimiento porque, teniendo en cuenta las necesidades sanitarias y de la población, es necesario un profesional de la formación profesional de grado superior que pueda optimizar el trabajo en cualquier circunstancia. Es intolerable que, sistemáticamente, existan profesionales que nos pongan la zancadilla en el momento en que damos un paso adelante en nuestro reconocimiento profesional y, automáticamente, existan gestores que escuchen estas protestas y den un paso atrás en lugar de defender su decisión que, por otra parte, está claramente argumentada y justifacada. La situación actual de pandemia no es el mejor escenario para poner trabas, al contrario, en la lucha contra la Covid-19 deberíamos sumar esfuerzos y hacer equipo para dotar de una asistencia ejemplar al usuario, con el único objetivo de acelerar la vacunación y conseguir la inmunidad de grupo lo antes posible. Esta era la intención de la Dirección de Profesionales de la Salud antes de recibir presiones y de que otros colectivos empezaran calificar de intrusismo profesional una medida que es la solución al problema que actualmente existe con la vacunación en Cataluña”, explica Tània Riera, secretaria autonómica de SAE.
La Generalitat de Catalunya ha habilitado a los TCE para vacunar contra la Covid
El reconocimiento de la Generalitat a los Técnicos en Cuidados de Enfermería (TCE) habilitándoles para la administración de las vacunas contra la Covid-19 es un paso más en la lucha del Sindicato de Técnicos de Enfermería (SAE) para conseguir que el colectivo ocupe el lugar que merece en la sanidad.
Los TCE estamos formados y capacitados para desarrollar más funciones de las que se nos permiten y un ejemplo claro lo encontramos en esta medida adoptada por la Generalitat, que nos hace cuestionarnos por qué no se ha aplicado antes y por qué no se extiende a otros servicios de salud.
Durante años hemos demostrado nuestra competencia y capacidad en la atención sanitaria, y durante la pandemia hemos sido un pilar fundamental en su lucha, apoyando a pacientes y familiares, trabajando codo con codo con nuestros compañeros del equipo de enfermería para salvar vidas e implicándonos con total dedicación para que el sistema sanitario siguiera funcionando. Sin embargo, los TCE aún tenemos que demostrar diariamente nuestra valía para conseguir el reconocimiento de nuestro trabajo, lo que es injusto y penoso, pues sin nuestra presencia, los equipos de enfermería estarían cojos. Por ello esta medida de la Generalitat la entendemos como un paso más en nuestra lucha; una lucha que nos lleva, una vez más, a exigir la actualización de nuestras funciones para que se adapten a la realidad asistencial actual, que poco tiene que ver con la de 1973, año de aprobación del Estatuto que aún rige nuestro trabajo. Pero también queremos aprovechar para recordar la necesidad de que nuestra formación pase a ser de grado superior, dotándonos de nuevas competencias para las que estamos capacitados y que supondrían una mejor organización de los recursos humanos en el sistema sanitario y, por lo tanto, de la atención al paciente, que merece profesionales mejor preparados.
Desde SAE esperamos que a partir de ahora los TCE empiecen a estar presentes en todas las actuaciones sanitarias para las que están formados y capacitados.
La Dirección de Profesionales de la Salud ha habilitado a los Técnicos en Cuidados de Enfermería (TCE) para la administración de vacunas contra la Covid-19, reconociendo así nuestra capacidad para llevar a cabo esta función, que desde el Sindicato de Técnicos de Enfermería (SAE) venimos reivindicando desde que se inició la campaña de vacunación.
El Real Decreto 546/1995, de 7 de abril, establece nuestro título profesional y las correspondientes enseñanzas mínimas que nos capacitan para participar activamente en el desarrollo de los programas de salud como agentes de salud y para proporcionar curas sanitarias aplicando técnicas básicas de enfermería, como es el caso de la vacunación contra la Covid-19.
Con esta habilitación, la Generalitat reconoce nuestra capacitación profesional para colaborar con los miembros del equipo de enfermería asumiendo las responsabilidades conferidas y cumpliendo los objetivos asignados.
“Desde SAE esperamos que esta medida no sea solo fruto de una falta de profesionales y que la Administración haya empezado a valorar nuestra formación y capacitación para desempeñar funciones para las que hasta ahora no se nos estaba considerando como profesionales. Con esta habilitación se demuestra que nuestro colectivo es fundamental en muchas más prácticas sanitarias que en las que estamos y esperamos que a partir de ahora la Generalitat nos tenga en cuenta en todos aquellos ámbitos en los que deberíamos estar ya presentes. Nuestra capacitación en la administración de vacunas nos permitirá continuar trabajando con la responsabilidad, compromiso y dedicación que siempre hemos demostrado en la lucha contra la Covid-19”, explica Tània Riera Castro, secretaria autonómica de SAE.
Los representantes de los trabajadores de USAE en la empresa GSAIB, empresa pública que tiene el encargo del servicio de ambulancias del SAMU 061, denuncian el total abandono y despreocupación por parte de la Administración sobre la situación de sobrecarga laboral que existe actualmente en la isla de Ibiza debido al incremento de los traslados de pacientes con patología Covid.
El servicio está desbordado, de tal manera que ayer la ambulancia que presta servicio en la localidad más alejada, San Juan, no pudo acudir al municipio por la saturación de servicios acumulados en la isla. Esta decisión desencadenó un descubierto para la población de San Juan y alrededores en el servicio de emergencias sanitarias, teniendo que acudir una ambulancia para atender a una paciente en la zona de Portinatx, cuyo estado de gravedad hizo necesario que acudiera una UVI móvil para poder atenderla correctamente.
Este tipo de situaciones se repiten constantemente debido a la falta de recursos para atender la elevada demanda de servicios, mientras tanto los distintos organismos implicados se dedican a pasarse la pelota de unos a otros: GSAIB se excusa en que Gerencia del SAMU 061 no ha pedido nuevos recursos y ésta nos explica que ha hecho la petición en varias ocasiones.
“Mientras tanto, los profesionales están agotados y los usuarios no reciben la atención adecuada. Desde USAE seguiremos trabajando para que se dote el servicio de los recursos necesarios y pedimos paciencia a la población y disculpas, pero los TES nos somos los responsables de los retrasos que continúan produciéndose con una media de cuatro horas en pacientes con patología Covid”, explica José Manuel Maroto, responsable de USAE.
El Sindicato de Técnicos de Enfermería (SAE) ha denunciado, una vez más, la situación de la Residencia DomusVI San Jordi ante la Inspección de Trabajo solicitando una solución a la alarmante situación de falta de personal y sobrecarga laboral de los profesionales del centro.
“La Residencia DomusVI San Jordi tiene un problema endémico de falta de personal que ocasiona trastornos de salud, tanto físicos como mentales, en todos los trabajadores del centro que están al límite de su capacidad tanto física como emocional, como de los propios residentes. Cuando una persona tiene que atender a 30 pacientes, todos ellos con mayor o menor grado de dependencia, es imposible que los tiempos de asistencia en sus necesidades sean los que deberían”, explica la secretaria provincial del Sindicato de Técnicos de Enfermería (SAE), Tània Riera.
SAE ha denunciado en reiteradas ocasiones, desde mayo de 2018, tanto ante la Inspección de Trabajo como ante la Consejería de Bienestar Social, la terrible e insoportable carga de trabajo tanto para los DUE del centro como para las gerocultoras. “La falta de DUE provoca que algunas de sus funciones recaigan en las gerocultoras, aumentado, aún más, su sobrecarga y teniendo que asumir funciones que, por titulación, no son de su competencia. Esto no sólo les ocasiona un gran estrés sino que son frecuentes los fallos, lo cual incide directamente en la salud de los usuarios”, manifiesta Tània Riera.
“Hemos comunicado en reiteradas ocasiones a los responsables de la empresa la necesidad de valorar la situación desde el Servicio de Prevención y los Delegados de Prevención y, en caso de estimar que puede comportar un riesgo hacia la salud de los trabajadores, poder adoptar las medidas necesarias para paliar los efectos que está acarreando esta situación en sus trabajadores. Sin embargo, es evidente que la empresa no tiene ninguna intención de solucionar estos graves problemas ya que ha suspendido tanto las dos últimas reuniones de prevención de riesgos laborales del Comité de Seguridad y Salud como la reunión extraordinaria pedida en junio por la Presidenta del Comité para abordar precisamente este tema. No se ha realizado correctamente el pertinente “Test de prevención de riesgos laborales”, requerido por la Inspección de Trabajo ante la denuncia presentada por SAE. Dicho test es de una importancia esencial, puesto que no solo ayuda a evaluar la situación laboral y anímica de los empleados del centro, sino que además permite descubrir de qué forma el personal está asistiendo a los pacientes y que aspectos serían mejorables”, continúa Tània Riera.
Una prueba inequívoca de la gravedad de la situación en este centro es el nivel de bajas por IT y los continuos movimientos de plantilla, muchas veces ocasionados por bajas voluntarias del propio personal que no se ve capaz de aguantar la presión de trabajar allí en esas condiciones laborales. Ninguna de estas ausencias se sustituye aumentando la presión del personal en activo y agravando aún más la insostenible situación.
Ante la falta de respuesta por parte de la empresa a nuestra reivindicación, se ha convocado al Comité para que adopte como Órgano colegiado la medida correspondiente, y una vez se apruebe, se solicite a la Inspección de Trabajo su implementación, ya que proteger la salud de los trabajadores es una premisa básica.