Además, el Sindicato de Técnicos de Enfermería ha solicitado que se revisen las cámaras de seguridad del hospital por si hubiera que llevar a cabo alguna actuación ante los altercados vividos en la tarde del lunes.

No hay justificación para que ni pacientes ni familiares, como ha sido en esta ocasión, arremetan contra los profesionales o las instalaciones sanitarias ante una situación que no es la que ellos desean.

“Ningún profesional sanitario puede venir a trabajar con el miedo de pensar cómo va a reaccionar pacientes o familiares ese día. El riesgo de sufrir una agresión no es inherente a ninguna profesión sanitaria y no podemos seguir sufriendo esta lacra. Los profesionales sanitarios”, explica Juan Antonio Moreno, secretario provincial de SAE en Córdoba que insiste en la necesidad de implementar medidas contundentes, que se cumplan debidamente y no queden en multas económicas, y que se lleven a cabo estrategias de concienciación social para luchar contra estos lamentables sucesos.

                La animadversión de la Directora de Enfermería del Complejo Hospitalario de Cáceres hacia el colectivo de Técnicos en Cuidados de Enfermería está frenando que la convocatoria para designar un Coordinador de TCE se ponga en marcha. No solo eso, su actitud demuestra con cada una de sus decisiones la necesidad de que en el centro se nombre este Coordinador a la mayor brevedad por lo que el Sindicato de Técnicos de Enfermería (SAE) exige al propio Servicio Extremeño de Salud que haga cumplir con lo establecido en el decreto reseñado.

                Cada día se hace más urgente que este colectivo cuente con un representante en las Comisiones de Dirección de los hospitales cacereños ante la injusta asignación de tareas y funciones de otras categorías profesionales a golpe de orden de servicio. El hospital cuenta con los profesionales correspondientes para estas funciones de transporte de material, movilización de aparataje… que no corresponden con el papel asistencial del Técnico en Cuidados de Enfermería y, sin embargo, la dirección de enfermería impone el desempeño de las mismas al TCE.

                Esta situación está generando entre los profesionales una creciente frustración y desmotivación laboral y profesional que está perjudicando tanto el ambiente de trabajo como su salud y el futuro de sus expectativas profesionales.

                Pero, además, parece evidente que esta mala gestión de los recursos humanos tiene repercusión inmediata en los pacientes porque el tiempo que un profesional de enfermería con competencias asistenciales concretas está dedicando a transportar material de unas unidades a otras es tiempo que no está dedicando a los pacientes. El bienestar y la calidad asistencial de los pacientes debería ser el objetivo prioritario de la dirección de enfermería pero parece evidente que no es así.

Se abre así una deficiencia en la asistencia de los usuarios de la Comunidad de Madrid que puede provocar una crisis sanitaria para la que es necesaria plantear alternativas.

Con este espíritu de debate Álvaro Cano Rosa y Juan José Abad Campos, vicesecretario y vocal de acción sindical respectivamente del Sindicato de Técnicos de Enfermería de Madrid participarán en el jueves 23 de junio en el debate sobre la crisis sanitaria que ha provocado en Madrid el cierre de los Servicios de Urgencias de Atención Primaria (SUAP).

En este encuentro que se celebrará a las 19 horas en la sede de UCE, convocante del debate, ubicada en la calle Mar Mediterráneo, nº5 Bajo participarán igualmente: Carmen Esbrí, Portavoz de MEDSAP, Mesa en Defensa de la Sanidad Pública, Vicente Losada de Auditas Sanidad, Luis Hernández de SummaT 112, Gloria Hergás de Plataforma Independiente de TCAE y Esmeralda Muñoz de la Asociación de Estudiantes de Biología de España (AEBE).

El Sindicato de Técnicos de Enfermería (SAE) se suma a la Semana Mundial de la Continencia con un cartel que quiere concienciar a la población sobre un problema que afecta aproximadamente a 10 millones de personas en España, de los que la mitad lo sufren en silencio debido al estigma social que produce.  Así, por ejemplo, el número de pacientes que viven con incontinencia fecal en nuestro país se sitúa entre los dos y los cuatro millones, un horquilla especialmente amplia debido a que menos del 30% de quienes la padecen consulta a su médico.
 Las causas de la incontinencia son múltiples y provocan no solo problemas físicos, sino también psicológicos debido al rechazo social, el aislamiento y las altercaciones en la calidad de vida. Por ello es fundamental que esta patología, que no es exclusiva de personas mayores ni de mujeres, se visibilice para acabar con el estigma y conseguir que la vida de los afectados mejore. Actualmente existe una gran variedad de tratamientos, como las modificaciones dietéticas, los fármacos o las irrigaciones, pasando por la rehabilitación anal y del suelo pélvico o cirugías reconstructivas, por ello es importante que todas las personas que padecen incontinencia acudan a su médico para encontrar el que mejor se adapte a su situación. 
“Esta patología tiene gran impacto en el bienestar y la dignidad de los afectados, limitando sus vidas, por eso desde SAE queremos alentar a quienes la padecen a consultarlo con su médico para encontrar el tratamiento adecuado que le permita mejorar su calidad de vida y recuperar la ilusión. Pero también queremos concienciar a la sociedad sobre este problema para acabar con el estigma que existe en torno a él, y a las instituciones sanitarias para que doten de la formación adecuada a los profesionales de la medicina, pues aún existe mucho desconocimiento sobre cómo hacer la detección y los tratamientos y herramientas que existen para abordar el problema”, explica Daniel Torres, secretario de Acción Social de SAE.
 

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                Ante esta situación FTPS reclama la publicación de las listas de puntuación provisional en la categoría de TCE y el cumplimiento del pacto en el que se basan la convocatorias de las Bolsas de Trabajo.

                Los demandantes de empleo en el Salud en la categoría de Técnicos en Cuidados de Enfermería llevan, incomprensiblemente, años esperando la publicación de los listados que les confirme su situación respecto a esta demanda de empleo.

                La contratación de un grupo de 30 personas para la validación de los datos no ha servido para que, a pesar de que el pasado mes de mayo el 50% del listado estuviera validado, se haya podido publicar aún el listado. Y lo peor, que no hay previsión de publicación.

                La de TCE es la segunda categoría con más número de aspirantes inscritos pero esto no justifica que lleve semejante retraso.

                Desde octubre de 2018 no se han añadido los puntos que los profesionales han generado en sus méritos, lo que supone un evidente perjuicio contra estos profesionales que no recibirán los nombramientos que les corresponderían por su puntuación actual y que, en la mayoría de los casos no se corresponde con la de hace cuatro años.

                Se están incumpliendo los principios constitucionales de igualdad, mérito y capacidad en los que, según el Anexo II del pacto de 20 de febrero de 2008, se basan las convocatorias de nueva inscripción y renovación de los integrantes de las bolsas de trabajo del personal estatutario de los centros sanitarios de la Comunidad Autónoma de Aragón.

                Por todo ello, desde FTPS reclamamos el debido cumplimento de este acuerdo y la publicación del listado de TCE a la mayor brevedad.